En un cazo ponemos las lentejas en agua fría y les pones a fuego fuerte. Mientras tanto…
ponemos en una cacerola las verduras picadas finas a rehogar con un buen chorro de AOVE (fuego medio-bajo).
Cuando ya estén blanditas añadimos el picadillo y le rehogamos junto con las verduras hasta que empiece a hacerse y a cambiar su color.
Pelamos la patata y la cortamos en cuadraditos pequeños, la añadimos al rehogado, mientras tanto ya habrán echado a cocer las lentejas, sacamos y escurrimos desechando esa agua.
Ahora ponemos las lentejas en la cacerola que tiene las verduras rehogadas, cubrimos con agua o caldo de carne (puede ser de brick). Tres dedos por encima de los ingredientes.
Dejamos hervir a fuego lento hasta que las patatas lentejas queden bien cocidas.
A mitad de cocción debemos probar y rectificar de sal si es necesario.
CONSEJO
Una buena idea es preparar el sofrito la noche anterior, y al día siguiente sólo cocer las lentejas junto con él. También podéis usar las lentejas ya cocidas en conserva, ganaremos mucho tiempo y seguiremos comiendo muy saludable.